Consejos para hacer la maleta

Quien sepa hacer la maleta con los ojos cerrados, sin pereza ni dudas, que tire la primera piedra. Es uno de los peajes de antes de emprender el viaje (o quizás incluso forma parte del proceso que evocaba el poeta T.S. Elliot) y cada vez hay más herramientas para convertirse en un experto.

En YouTube más de 1.740.652 internautas han visto Pack like a pro, un vídeo –utilizado por Ryanair por aleccionar un grupo de clientes rebeldes– en el cual un joven prepara la bolsa para una aventura de dos meses y con una especial destreza hace caber un par de pantalones, una decena de camisetas, calcetines, ropa interior y una sudadera. Expertos en viajes ligeros, como los de la web OneBag.com, apuntan que las claves para empaquetar bien son saber qué se necesita para la salida, qué se mete a la maleta y cómo se distribuye el contenido. El objetivo es viajar sin sobrepeso, pero también argumentan que su filosofía responde a cuestiones de seguridad, economía, flexibilidad, serenidad y ecología.

Cómo optimizar espacio en tu maleta

No se aleja mucho de los planteamientos racionales de las asesorías de imagen como Me Queda Bien y Víste-m, que, además de ayudar a optimizar el armario, ofrecen sesiones para aprender a hacer la maleta perfecta. «La gente sabe hacerla, pero nosotros enseñamos a poner exactamente el que necesitas», argumenta Andrea Villalonga, asesora de imagen y colaboradora de Víste-m. «A menudo quien pide ayuda lo hace porque está harto de llevarse muchas cosas y no ponérselas», añade. Antes de hablar de cantidades y de prendas de ropa se tiene que pensar en el destino y las temperaturas, el tipo de viaje (no tiene nada a ver un crucero -con protocolos de indumentaria-, con un viaje de trekking ) y el formato de maleta.

Coincidiendo con la temporada de vacaciones, los blogs de profesionales y particulares también recogen consejos: va bien hacer una lista y preparar conjuntos, en ninguna parte de coger ropa desparejada, según el blog de iMAG (grupo-imag.blogspot.com); se tiene que empezar decidiendo el calzado, que es el que determina la ropa, como recomienda la asesora María Uranga.